- Se espera que para el año 2050 la paridad en el rubro sea total a nivel país.
Chile ostenta el tercer lugar a nivel mundial con la mayor presencia de mujeres en la industria minera y su cadena de valor, llegando al 15,2% en todo el país, cifras reveladoras entregadas en el 6to estudio Mujer y Minería (agosto 2023). Cifra que representa un importante avance, posicionándonos detrás de países como Australia con el 18% y Canadá, alcanzando el 20% posicionándolo como líder internacional.
Este avance implica un desafío significativo para la minería chilena: alcanzar el 25% de dotación femenina al 2030 y lograr la paridad total al 2050, según lo acordado por importantes industrias mineras del país y las políticas de estado. Este desafío va más allá de simplemente aumentar los cupos laborales para mujeres, también implica generar espacios para que técnicas y profesionales de diversas áreas puedan incursionar en el mundo minero y establecer oportunidades de crecimiento para que más mujeres obtengan roles de liderazgo y directivos.
“Desde la Asociación de Industriales de Antofagasta, valoramos este avance en la presencia de mujeres en la minería chilena. En el marco del Mes de la Mujer, destacamos la importancia de seguir avanzando para estar a la par de países desarrollados y cumplir con los compromisos acordados. Esto implica abordar las necesidades, desafíos y exigencias que la industria y la sociedad demandan en equidad de género”, indicó Josefa Pellejero, Subgerente de Desarrollo Empresarial, AIA.
Resultados que indican cómo la minería nacional ha experimentado un significativo aumento en la presencia de mujeres, pasando de apenas el 0,6% en 2014 (INE), a aproximadamente 40.000 mujeres ejerciendo en la industria actualmente. Crecimiento que representa un salto cuantitativo importante, reflejando el compromiso de las empresas y las políticas de Estado para promover la inserción de las mujeres en el sector.
La Región de Antofagasta, capital minera de Chile y del mundo, un territorio donde estas cifras cobran especial relevancia, por lo que es fundamental continuar aunando esfuerzos por la inclusión de más mujeres en el rubro, no solo aumentando los cupos laborales, sino también creando espacios para su desarrollo profesional y de liderazgo, espacio donde la equidad de género representa un impulso para el desarrollo sostenible y la competitividad de la industria nacional.