- El Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de Atacama lideró una visita técnica al proyecto Modificación Proyecto Mina Los Colorados en Huasco, junto a representantes de entidades con competencia ambiental. La expansión busca elevar la capacidad productiva y extender la operación minera hasta 2033.
El SEA Atacama encabezó una visita técnica al sitio del proyecto de modificación de la Mina Los Colorados en Huasco, con el objetivo de evaluar en terreno los impactos ambientales asociados a su futura expansión que contempla un aumento en el volumen de procesamiento y continuidad operacional por casi una década más.
La visita, realizada por el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de Atacama, reunió a representantes de los Órganos de la Administración del Estado con Competencia Ambiental (Oaeca), incluyendo a profesionales de la Seremi de Desarrollo Social y Familia, el Gobierno Regional, la Municipalidad de Huasco, Conaf y la Dirección General de Aguas (DGA), junto al titular del proyecto y sus asesores técnicos.
El proyecto de modificación busca aumentar el movimiento total de la mina a 95 millones de toneladas anuales, junto con la ampliación de la capacidad de procesamiento de las plantas de beneficio de 14,3 a 14,5 millones de toneladas de mineral por año. Este ajuste también permitirá incrementar la producción de preconcentrado de hierro de 9,15 a 9,8 millones de toneladas anuales.
Entre los cambios más relevantes está la actualización de la configuración del rajo, los botaderos y los acopios existentes, así como ajustes en instalaciones mineras, factores claves que fueron inspeccionados durante la jornada. Estos elementos son cruciales para garantizar que la continuidad operacional prevista hasta 2033 se desarrolle bajo estándares ambientales adecuados.
“La visita técnica permite a los organismos competentes evaluar directamente en terreno los aspectos más sensibles del proyecto y verificar su alineación con la normativa ambiental vigente”, comentó un representante del SEA Atacama durante la actividad.
La revisión en terreno busca fortalecer el proceso de Evaluación de Impacto Ambiental (EIA), permitiendo que los entes reguladores tomen decisiones informadas sobre la viabilidad de los ajustes propuestos, en un contexto donde la minería y la protección ambiental deben avanzar de manera equilibrada.