- La fusión de Anglo American y Teck proyecta a Tarapacá como epicentro del cobre, con foco en empleo, formación y sostenibilidad.
La fusión entre Anglo American y Teck Resources, valorada en más de 50.000 millones de dólares, fue recibida con entusiasmo en Tarapacá. El gobernador regional, José Miguel Carvajal, destacó que este movimiento global puede traducirse en mayor productividad, más empleo y un incremento en los recursos fiscales que llegan a la región a través del royalty minero. “El impacto mayor podría ser el dinamismo económico que genera una mayor productividad, traducido en empleo, tecnología y más oportunidades para Tarapacá”, señaló, aunque con la mesura de que el proceso tomará entre 12 y 18 meses en concretarse.
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La región en cifras
Con 330 mil habitantes, Tarapacá depende en parte de la minería: el sector da empleo directo a más de 19 mil personas, y se proyecta que en la próxima década se requerirán cerca de 6 mil nuevos trabajadores solo para cubrir la demanda regional. Sin embargo, la tasa de desempleo ronda el 9 %, lo que plantea el desafío de transformar esta fusión global en oportunidades concretas para la población local.
Collahuasi y Quebrada Blanca, ambas con operaciones de clase mundial en la región, serán piezas clave de Anglo Teck. De su integración podrían surgir más de 175 mil toneladas adicionales de cobre al año hacia 2030, consolidando a Tarapacá como uno de los polos cupríferos más importantes del planeta.
Territorio
Desde las comunidades, Miguel Caqueo, experto en Tierras, Territorios y Gestión Pública. Aymara.
Advierte que la integración obliga a revisar los compromisos ambientales y sociales ya firmados. “Las organizaciones sociales que están en las áreas de influencia de Collahuasi y Quebrada Blanca deben revisar los compromisos ambientales ya firmados, porque con esta fusión muchas de esas medidas compensatorias deberán refundirse en un mismo acuerdo. (…) Existe un déficit tremendo en capital humano (…) nuestras comunidades tienen saberes ancestrales que deberían ser reconocidos.”
El mundo académico también observa la fusión como un llamado a la acción. El decano de la Facultad de Ingeniería y Arquitectura de la UNAP, Miguel Segovia, plantea: “La Universidad Arturo Prat debe jugar un rol protagónico en la formación de profesionales que acompañen este proceso de transformación industrial. (…) Debemos fomentar investigación aplicada en desalinización, reutilización de residuos y economía circular, junto con promover la inclusión de mujeres y comunidades indígenas en carreras STEM.”
Para el seremi del Trabajo, Ignacio Prieto, la integración debe materializarse en empleos de calidad: “El aumento de producción proyectado debe ir acompañado de más empleo local, mejores programas de capacitación y condiciones laborales que estén a la altura de una minería moderna y sostenible.”
La formación técnica aparece como el corazón del desafío. El gerente general del CEIM, José Antonio Díaz, sostiene:
“La fusión Anglo Teck no solo marca un hito en la minería mundial, sino que consolida a Chile como líder global en la producción de cobre. Este proceso generará economías de escala y una mayor eficiencia operativa que fortalecerá a toda la industria y su cadena de valor, y que, en un escenario de creciente demanda, podría impulsar el desarrollo de nuevos proyectos.
Ese crecimiento trae consigo un gran desafío: contar con capital humano preparado para responder a estos nuevos escenarios. Desde CEIM vemos aquí un espacio único para fortalecer la formación técnica local, con programas que integren innovación, automatización, digitalización y sostenibilidad.
Nuestro desafío es anticiparnos y entregar las competencias que esta nueva era minera requerirá, asegurando que el talento regional sea protagonista del futuro de la industria.”
Oportunidades
El sector privado observa la fusión como un impulso decisivo. El gerente general de la AII, Marcos Gómez, lo interpreta como una oportunidad estratégica: “Este anuncio es una excelente noticia para la industria minera y, especialmente, para nuestra región, ya que representa una oportunidad estratégica que podría fortalecer decisivamente la inversión sectorial en Tarapacá. (…) Esto constituye la oportunidad para la generación de nuevos empleos y oportunidades locales, así como aumentar la cantidad de proveedores regionales.”
En paralelo, la discusión sobre sostenibilidad emerge con fuerza. Para el director ejecutivo de CircularTec, Luis Martínez Cerna, la escala de Anglo Teck abre nuevas fronteras: “La fusión abre una ventana estratégica para que Tarapacá lidere la sostenibilidad minera a nivel global. (…) Si articulamos tecnología, regulación y participación territorial, podemos convertir a la región en un laboratorio vivo de minería regenerativa y trazable.”
La directora regional de Corfo, Catalina Cortés, refuerza la misma línea: “La instalación de una compañía de estas características no solo implica invertir en infraestructura o empleo, sino también fortalecer el diálogo con las comunidades, apoyar proyectos de desarrollo territorial sostenible y generar beneficios tangibles más allá de la actividad extractiva.”
La creación de Anglo Teck reacomoda el tablero global del cobre y coloca a Tarapacá en el centro de la conversación mundial. Comunidades, academia, autoridades, empresarios y organismos de innovación coinciden en un diagnóstico: la fusión es una oportunidad histórica para transformar productividad en empleo local, formación de capital humano y sostenibilidad.
El reto, coinciden, es aprovechar el momento. Porque más allá de las cifras millonarias y de los nuevos proyectos, lo que está en juego es si Tarapacá será capaz de convertir este reacomodo del negocio minero en un desarrollo propio y duradero.
